Nelly y su conversación con las hormiguitas...

Mirando esta foto de Nelly me hizo recordar a mi madre; que amaba tanto o mas que ella la Vida en general... cuando en cuclillas y recién lavado su pelo me hizo tomarle una fotografía con Pichichus ambas cabezas enfrentadas... porque el también era su hijito... ese que charlaba largo largo rato mirándolo a los ojos y recitándole: ¿es tu que no sabes - decía acariciándole el flequillo para atrás al negro caniche para que sus miradas se encontraran frente a frente-
                                                     que todas las madres
                                                      pueden leer en los ojos de sus hijos...
                                                      como el niño en su cartilla?
Y Cherry tenia esa plenitud... ¡ese estar ahora y aquí viviendo el mundo con un cariño tan particular y a la vez tan cálido!

Y yo se que les hablabas con dulzura preguntándoles adonde iban y sobre todo les pedías que te dejaran entrar en la filita... a ver si la carga no era tan pesada...

Porque todo era en ti un deseo de experimentar.

Y ahora mi mente se acuerda de Indra Devi y lo que leí de su relación con las hormigas:

Pero,¿Cuantos Mandamientos y Bienaventuranzas recuerda usted todavía?¿es usted consciente de su actitud hacia ellos? ¿Los sigue en realidad o intenta seguirlos?¿O es usted indiferente hacia ellos?

Así, por ejemplo, hay muchos individuos que sinceramente están convencidos de que no matan.Pero si comparan su reacción personal al Mandamiento de "No Mataras" con las de, supongamos. Albert Schweitzer, cambiaría de manera de pensar y de sentir.Porque Schewitzer no permitía ninguna manera de matar en el hospital que fundo y dirigió en África Ecuatorial, en el cual predicaba "el respeto a la vida" , pero no solo a la vida humana sino a la vida en general.

Se me recomendó esto, cuando oi a J.Allen Boone, autor de la obra Kinship with All Life (El parentesco con la vida en general) que cuando iba a regar su habitación con insecticidas para librarse de las hormigas se le ocurrió que ellas también formaban parte de la  Vida Grande y que tenían derecho a existir. Al cabo de unos cuantos titubeos, se decidió a hablarles, diciéndoles que respetaba sus deseos de vivir y que no las iba a matar, pero como su lugar estaba en el jardín les rogó que se fuesen. Se les advirtió y se les dio un plazo de dos días, haciéndoles saber que quizá no tuviese mas remedio que hacer algo positivo en ese sentido si se negaban a escucharle.

-No lo creerán ustedes- concluyo diciendo- pero a los dos dias las hormigas habian desaparecido.

Esta interesante historia me impresiono sobremanera.Poco después, Olga, nuestra sirvienta, descubrió en un rincón de nuestro cuarto de estar, donde apareció muerta una polilla grande, detrás de una cortina, una hilera de hormigas. Acordándome de la experiencia de Allen Boone, le dije que no las tocase, sino que me dejase intervenir a mi. Una vez que se fue me senté en el suelo a presentarles mis excusas, diciéndoles que se fuesen adonde les correspondía y prometiendoles darles un poco de azúcar cuando estuvieran afuera. Unos cuantos días después se habían ido.

-Es que ya no tenían nada que las atrajera- dijo Olga.

Pero cuando levanto la cortina, vimos otras dos polillas grandes muertas en el suelo, sin una sola hormiga alrededor. Yo me sentí sumamente contenta y la mire con gesto triunfal. (Del Libro Yoga para todos Indra Devi)..

es gracioso...pero Enri Praolin se ha querido etiquetar solo en esta entrada...debe querer seguir enseñando el evangelio... así que lo dejo nomas...

Ayer vi al Padre Pepe ese de la Villa 21 ahora ocuparse de los santiagueños  y no pude hacer otra cosa que recordarlo (es casi el mismo estilo de lucha y dedicación al mas necesitado)